Tan pronto como se entera de que los hombres de Nezir secuestrarán a Bahar, Sarp, que se presenta en Tarlabaşi. Incapaz de entender cómo Sarp supo de esta noticia, Suat sospecha de Sirin y Münir. Pero esto, no será todo, la tragedia y la tristeza teñirán de rojo el barrio… Bahar no está feliz porque deja a todos en el barrio y lidiando con esos matones tan peligrosos. Ceyda, Arif, Enver… todos están destrozados por lo ocurrido. Bahar quiere que Sarp averigüe si todos están a salvo, pero el hombre decidirá tomar un camino peligroso: la mentira.